Masturbación femenina, ¡descúbrete!

Con un dedo, con dos o con toda la mano. En modo manual o con juguete erótico. De cualquiera de estas formas, la masturbación es siempre saludable y excitante.

Basta un beso apasionado con tu chico para que tu cuerpo te pida más. Pues lo mismo sucede con la masturbación.

Si quieres activar la libido, lo primero es entrar en materia. ¿Cómo? Cierra la puerta de tu dormitorio y desconecta el móvil y la tele. Es importante que estés relajada.

Recrea mentalmente situaciones que te exciten, como fantasear con un famoso o la última sesión de sexo salvaje con tu novio. En cuanto tu mente dé el pistoletazo de salida, lo demás es empezar y disfrutar.

Masturbación en el baño

El mundo del dónde y cómo en la masturbación es muy variado, aunque, según parece, muchas mujeres exploran y descubren su cuerpo en la bañera. Es un lugar muy íntimo, cierto, donde además el agua caliente hace que los músculos se relajen, la tensión de todo el día vaya desapareciendo poco a poco y el cuerpo esté más sensible a cualquier tipo de estímulo y caricia. Así que… ¿por qué no intentarlo?

Prepara un baño, sumérgete en el agua y desliza las manos por la zona interna de los muslos, el vientre y el pecho, como si fuera otra persona la que te estuviera tocando. Haz círculos alrededor de los pezones e incluso pellízcalos delicadamente. Si esa es una de tus zonas clave, será el epicentro para un terremoto de placer que se extenderá a otras ubicadas más hacia el sur.

Sigue disfrutando de ti y acaríciate lentamente los labios vaginales. Explora la zona trazando dibujos sobre el clítoris y acelerando el ritmo si es lo que quieres. Recuerda que no todas las partes del cuerpo son igual de sensibles ni responden de forma similar a la estimulación y al roce de los dedos. En ese momento, eres la dueña y señora de tus propios dominios y puedes experimentar con tu cuerpo de múltiples maneras. Te sorprenderán las mil y una sensaciones que eres capaz de regalarte.

Utiliza un vibrador

Los vibradores y estimuladores de clítoris proporcionan una estimulación tan fuerte y rápida que son perfectos para alcanzar el orgasmo sin grandes complicaciones. No obstante, los expertos recomiendan usarlos cuando ya estés tan excitada que el clímax sea coser y cantar.

Alterna la velocidad y el ángulo de presión de forma que aumentes la excitación a tu gusto. Y si las vibraciones son muy fuertes, mastúrbate con la braguitas puestas. Pero, ¡ojo!, recurrir al vibrador a diario puede ser adictivo e insensibilizar algunos nervios. Por eso, lo mejor es alternar los juguetes sexuales con las técnicas manuales de las que hablamos también aquí. Toma nota.

Técnica manual

No hay una técnica exclusiva que funcione a la perfección para todas las mujeres pero se ha comprobado que algunas son más eficaces y excitantes. Por ejemplo, para muchas féminas, el hecho de trazar pequeños círculos en forma de ocho sobre el clítoris es el principio de una sesión gloriosa. Es muy importante que sepas diferenciar entre “capuchón” y “glande del clítoris”. El primero recubre al segundo, protegiéndolo de roces. Si tiras del capuchón hacia arriba descubrirás el glande. Préstale atención y concéntrate en él.

Conviene que sepas que no todas las mujeres tienen el clítoris igual, a veces es más visible y otras está más escondido. Si eres de estas últimas, coloca una mano sobre el pubis y estira la piel hacia arriba para que “la perla” asome su cabecita y puedas estimularla correctamente.

Métodos de masturbación manual

Hay un movimiento conocido como “el compás”, que consiste en colocar el dedo índice y el corazón sobre cada uno de los labios menores, dejando el clítoris en medio, y deslizarlos arriba y abajo y de un lado a otro, de modo que los labios se toquen y el roce aumente la excitación.

¿Otro método?

El de “los tres dígitos”. Se trata de usar el dedo índice y el anular para abrir los labios vaginales y, con el del medio, el dedo corazón, acariciar la punta del clítoris y toda la zona hasta que, poco a poco, vayas directa al placer.

¿Necesitas más fricción?

Sigue el consejo de Emma Taylor y Lorelei Sharkey autoras del libro El big bang, La guía del nuevo universo sexual: “Cabalgad en la cama y montad aquellos objetos inanimados que tengáis más a mano, como almohadas, cojines o peluches”. Contrae los músculos vaginales, como cuando haces el amor con tu chico y, lo más importante, sea cual sea la técnica que uses no te obsesiones con tener un orgasmo en menos de 10 minutos. ¿Ok?