Uso supersticioso de la ropa para despedir año

Comerse 12 uvitas a la medianoche es un ritual compartido por algunas personas el 31 de diciembre. Claro, antes del abrazo, la preparación incluye seguir ciertos parámetros estéticos que recorren los siempre cautivantes caminos de la moda.

Por eso, antes de bailar el tradicional estribillo merenguero “que te pasa viejo año que te pasa, que ya tienes tu maleta preparada”, muchas personas escogen un tono específico para despedir el año y bendecir los 365 días por venir.

El morado, tan de moda en los últimos meses, es el color que Heliana Montes prefiere lucir el 31 de diciembre. Su amiga Arleny Lantigua siempre escoge un atuendo negro a combinar con accesorios dorados.

El dicho de que “para el gusto se hicieron los colores” tiene asidero en la diversidad de tonos seleccionados por la gente interesada en cubrirse la piel la esperada noche del 31. En esa fecha, Pilar Vicente, ama de casa y devota del cristianismo, usa algo amarillo, porque “da suerte”, mientras, a su compañera de templo, Carmen Rodríguez, le da igual y no planea qué se pondrá la referida noche. En torno al amarillo, las luces atribuidas a este color forman parte de las creencias fortalecidas con el tiempo.

El volumen de encargo que recibe al final de año y la paleta de colores con que seduce a sus clientes, le otorgan a la creativa y conocida modista Adelina Rodríguez, la potestad de asegurar que la gente interesada en estrenar la última noche del año, prefiere entallarse ropa roja, pues aparte de lo llamativo del color, según el portal www.euroresidentes.com, el tono simboliza poder y se asocia con vitalidad y ambición.

Confianza en sí misma, coraje y actitud optimista ante la vida, también son herencias y “vibras” endilgadas a este color. El ángulo negativo que supuestamente conlleva es que estar demasiado rodeado de rojo, vuelve irritable, impaciente e inconformista a la persona.

Para Adelina Rodríguez, la alegría y la fiesta que inspira el rojo lo hace rey entre las tonalidades existentes. Para el primero de enero, asegura que muchas personas utilizan algún atuendo amarillo “para la suerte”.

Estrenar tanto el 31 como el primero de enero también tiene connotaciones especiales. “La gente mantiene la costumbre de estrenar esos días porque dice que el resto del año se quedará usando ropa nueva”.

Fuente:Listin diario.com