La prohibición de fumar en todos los establecimientos comerciales de Francia desde comienzos de año ha redundado en la mejora de la salud cardiovascular de los empleados en bares y discotecas, según el Comité Nacional Contra el Tabaquismo (CNCT).
Esta es una de las principales conclusiones del balance del primer año de aplicación de la prohibición presentado hoy por el CNCT, que reconoció que los cafés y las discotecas han visto disminuir su negocio en un 3 por ciento a causa de la medida.
El organismo explicó que un estudio médico realizado con un grupo de empleados de bares y discotecas antes y después de la prohibición revela que al trabajar en un ambiente sin tabaco sus arterias habían vuelto a una situación “casi normal” con una disminución del riesgo de sufrir un infarto.
En el primer diagnóstico hecho en diciembre de 2007, antes de que se impidiera fumar, “el funcionamiento de las arterias de estos asalariados presentaba anomalías importantes respecto a una población testigo no fumadora”, recordó
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